Pastilla del día después o pastilla de emergencia:Este es un tema sumamente grande y controversial puesto a la gran cantidad de puntos de vista distintos. Al buscar en internet es prácticamente infinito porque salen aproximadamente 186,000 resultados relacionados a este tema en google.
Para empezar el nombre comercial mas utilizado es LEVONORGESTREL de 0.75 mg. La denominación de píldora del día después resulta incorrecta ya que puede usarse durante los 3 - 5 días siguientes (72-120 horas) después del coito. Esta píldora consiste en un método anticonceptivo que se utiliza ocasionalmente, luego de haber mantenido una relación sin la protección adecuada existiendo riesgo de un embarazo no deseado; pero nunca como un método anticonceptivo habitual ni en forma frecuente y muy importante no protege contra las enfermedades de transmisión sexual.
La primera píldora de emergencia debe ser tomada lo más pronto posible, hasta un máximo de 72 horas después (levonogrestrel) o a las 20 horas siguientes (acetato de ulipristal), la siguiente exactamente a las 12 horas de haber tomado la primera. Su eficacia es mayor en las 24 horas siguientes al coito y va disminuyendo con el paso del tiempo.
La eficacia de la pastilla del día siguiente dependerá en gran medida del menor tiempo en que se tome la primera píldora. Si se vomita antes de las 3 horas de haber tomado cualquiera de las dos pastillas debe tomarse nuevamente.
La eficacia de la pastilla del día siguiente dependerá en gran medida del menor tiempo en que se tome la primera píldora. Si se vomita antes de las 3 horas de haber tomado cualquiera de las dos pastillas debe tomarse nuevamente.
Aunque algunos profesionales sostengan que la menstruación llegará en la fecha prevista esto no es así en todos los casos, en muchas mujeres aparece el sangrado pocos días después de haber tomado la píldora de emergencia.Esa menstruación anticipada puede tener características diferentes a lo habitual, por ejemplo mayor o menor cantidad de sangrado, tener un color diferente, durar más o menos días. Cuando esto ocurre por lo general la siguiente menstruación ocurrirá mucho después de lo previsto. En los casos en que no hubo sangrado anticipado es posible que la menstruación llegue en la fecha esperada, si esto no es así realizar un test de embarazo para salir de dudas.
La píldora no es 100% segura, tiene una efectividad que va de un 75% hasta un 90% o 95%. Su eficacia depende en parte si la relación de riesgo ocurrió en periodo de ovulación (aproximadamente en la mitad de tiempo entre una menstruación y la siguiente) o fuera de esos días de mayor riesgo. Este concepto parece no estar claro y debido a la falta de información muchas adolescentes o mujeres adultas suelen tomar la pastilla del día después como un método anticonceptivo normal recurriendo a ella luego de cada relación.
Entre las ventajas se encuentran: En caso de haberse producido un embarazo la píldora del día después no produce abortos ni afecta al futuro bebé, pueden usarse después de realizar el coito, (dentro de los tres días siguientes -72horas-) y la posibilidad de continuar usando pastillas anticonceptivas regulares.
Entre sus desventajas se encuentran: Tomar la píldora luego de una relación de riesgo no garantiza que no ocurra un embarazo si se mantienen relaciones sin protección los días siguientes, no se puede usar la pastilla del día después en forma habitual, se aconseja que puede utilizarse como máximo 3 veces al año ya que puede afectar los ovarios y la salud de la mujer, las dosis hormonales que contiene la pastilla del día después pueden llegar a ser 20 veces superiores a las de las píldoras anticonceptivas. También la aparición de manchas en la cara similares a las del embarazo, aumento del vello facial y corporal, así como el aumento de peso, secreciones en las mamas, posibilidad de nódulos (bultos) en las mamas, hipertensión, trombosis (coágulos en el interior de las venas), aumenta la posibilidad de padecer quistes de ovario, embarazos ectópicos (fuera del útero), edemas (inflamaciones en las piernas), aparición de várices.
Efectos adversos muy frecuentes: mareos, dolor de cabeza, náuseas, dolor en la parte baja del abdomen, aumento de la sensibilidad en las mamas, retraso en la menstruación, menstruación excepcionalmente intensa, sangrado, fatiga; frecuentes: diarrea y vómitos.
Otros efectos son el cansancio , cefalea , sangrado no relacionado con menstruación, ,dolor hipogástrico , mareo, diarrea, depresión, ansiedad, insomnio, labilidad emocional (modificaciones del estado de ánimo), disminución de la libido (disminución del deseo sexual), migrañas, palpitaciones, dolor torácico, hipertensión arterial, venas varicosas, exantema, quistes ováricos, acné, Se han detectado también TVP trombosis venosa profundas y TEP trombo embolismo pulmonar, así como otros embolismos (Ictus Por lo regular la mayoría de efectos secundarios suelen desaparecer, una vez acabada la administración en el plazo de 1 a 2 días, pero pueden extenderse durante más tiempo. También puede adelantarse la siguiente menstruación o tener un retraso de siete días de su último periodo.
Aún no están claramente establecidos todos los riesgos que puede presentar la ingesta abusiva de la pastilla del día después, por lo tanto es necesario tomar conciencia de que para evitar embarazos no deseados es necesario utilizar métodos anticonceptivos como las píldoras, inyecciones, preservativos de látex y recurrir a la pastilla del día siguiente únicamente en forma ocasional.
Estos malestares no afectan a todas las mujeres por igual. No protege contra infecciones de transmision sexual. Aunque la pastilla del día después se venda sin receta en algunos países es recomendable que sea indicada por un médico.
No se recomienda el consumo de la PDD a aquellas mujeres con insuficiencia hepática grave, síndrome de mala absorción, como la enfermedad de Crohn o mujeres con riesgo de sufrir un embarazo ectópico, sangrado vaginal inexplicable, porfiria, hipertensión severa, diabetes melitus, epilepsia, enfermedad isquémica coronaria, ACV, historia de cáncer de mama.
Costa Rica ve con buenos ojos medida adoptada por EEUU sobre venta libre de píldora del día después para jóvenes mayores de 17 años. Esta nueva norma de la agencia de medicamentos de ese país, FDA, revive 2 posiciones en el mundo Por un lado, el Ministerio de Salud aprueba su uso pero no como método de planificación familiar, si no como una adecuada opción para prevenir embarazos luego de una relación sexual sin protección, con protección defectuosa o en caso de violación. Pero la Iglesia Católica insiste en que se trata de un método abortivo, aunque varias organizaciones justifican que la pastilla evita la fecundación del óvulo o inhibe el transporte de los espermatozoides. Según la Asociación Demográfica Costarricense, el año pasado hubo 74.284 nacimientos, de los cuales casi 15.000 fueron de mujeres menores de 19 años. La difusión de anuncios que promueven la utilización de anticonceptivos de emergencia en las mujeres, enfrenta nuevamente a la iglesia y a los médicos. Actualmente en Costa Rica no se venden anticonceptivos de emergencia, pues lo que hace falta es que alguna casa farmacéutica se registre y cumpla con las normas establecidas. De acuerdo con las autoridades de Salud, aun se debe definir a quienes se les podrá vender la polémica píldora.
Ministerio de Salud y otras entidades comprobaron que la píldora “del día después” no es abortiva y las autoridades de Salud tienen la potestad de aceptar el ingreso de marcas que cumplan los requisitos. Antes de aprobar la venta libre del anticonceptivo de emergencia, nuestro país debe contar con una legislación que impulse la educación en materia sexual. Así se pretende evitar que la gente reemplace los métodos de protección por los de emergencia.La reforma a esa ley está guardada en la Comisión de Asuntos Sociales de la Asamblea Legislativa desde hace 2 años, pero recientemente pasó del puesto 170 al número 16. Su aprobación permitiría que la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) lo distribuya a las mujeres.
En Estados Unidos y en Europa se utiliza desde hace 40 años, mientras en Latinoamérica 15 países como Brasil y México permite la venta, sin embargo han tenido que enfrentar críticas de los sectores religioso, político y social.
